Al final el que manda no soy yo.
¿Quién está detrás de mí?
¿Quién me susurra detrás del oído?
¿Hay alguien más?
Detrás de mí está él.
“Él” soy yo.
Es una paradoja interna,
un enfrentamiento interno,
un desdoblamiento de la persona.
“Él” es el que se esconde detrás de mi. Es una lámpara
que envuelve con su luz a un objeto.
Ese objeto soy yo. Me envuelvo yo mismo.
Soy mi propio títere.
A veces soy manejado por ese otro, que no soy yo. Ese
otro no es más que “él”, es decir, yo.
Esto a veces es un intento de dejarle toda la
responsabilidad a “él”.
“Él” tiene todo la culpa.
Aunque “él” sea yo.
es la paradoja interna!!!!
ResponderBorrarme gusto!!
Gracias, Cesar!
BorrarBien !
ResponderBorrarGracias por pasar!
BorrarQuien es el que mira a traves de mis ojos,es él....que soy .y no puede haber otro
ResponderBorrarHola! Para mi somos dos, o más, depende el conflicto que tengamos. ¿Cuantas respuestas puede haber ante un preguntas? O mejor ¿Cuantas maneras de actuar puede haber? Creo que muchas y siempre una gana a la otra. Es decir, siempre cuando tomamos decisiones peleamos contra un él. Desde mi humilde opinión creo eso. Saludos!!!
Borrarcreo que estas un poco confundido...siempre soy yo, no importa la fisonomía o las facetas que adopte...siempre soy yo...pero también hay un lado oscuro que no conocemos de nosotros...
ResponderBorrarHola, ¡Por eso! Hay un lado oscuro y lo represento en este poema mediante el Él. Aquí el lado oscura es la otra persona, que a su vez, es parte de mi y depende de mí quién es el que gane. Es una lucha interna, como dr jekyll y mr high. Salvando la distancia entre un humilde poema y un gran libro como lo es ese.
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